Por: Lic. Viviana Langer Todos los alimentos que consumimos envasados vienen con sus respectivos rótulos. En ellos se nos brinda una determinada información nutricional que debemos aprender a descifrar.
Desde el año 2006 es obligatorio que todos los alimentos envasados tengan la información nutricional.
La información que es obligatoria son los nutrientes (hidratos de carbono, proteínas, grasas totales, las grasas saturadas, monoinsaturadas y poliinsaturadas, las grasas trans, el colesterol, la fibra dietaria, el sodio y el valor calórico que se expresa en Kcal.
Esa información debe estar expresada según el tamaño de la porción y en forma opcional también se puede expresar según el contenido de esos nutrientes en 100g del alimento. Además hay una columna que expresa el porcentaje de la recomendación diaria del nutriente (expresado como VD) que se cubre consumiendo esa porción de alimento
Cómo leer los rótulos
Los rótulos nos informan que nos aportan los alimentos. Comprendiendo esa información podemos comparar y decidir que alimento consumir.
Lo primero que hay que leer es el tamaño de la porción, es lo que nos va a guiar para determinar cuánto alimento debemos consumir para alcanzar el aporte de nutrientes y calorías deseado y no pasarnos.
En el caso de diabetes hay que saber si hay aporte de azucares.
Tambien es importante saber si el aporte de fibra es alto (mas del 10% del VD)
En el caso de celiacos deben buscar el logo de alimento libre de gluten.
Elegir sanamente
El exceso de azúcar tanto como el exceso de sodio son perjudiciales para la salud. Con lo cual a la hora de elegir prefieran los alimentos que no tienen agregado de azúcar y el que contenga menor cantidad de sodio.
Un adulto sano debería consumir alrededor de 2000 kcal diarias. Los niños en edad escolar aproximadamente lo mismo. Y en cuanto a los deportistas, deben contemplarse un conjunto de factores para determinar el valor calórico que requieren para la practicar su deporte saludablemente.
Como ya se sabe las grasas trans son muy perjudiciales para la salud. Es conveniente reemplazarlas por alimentos que no las contengan. Pero si en algún momento consumen galletitas o golosinas que están elaboradas con grasas parcialmente hidrogenadas (grasas trans) un aporte poco frecuente (1 vez por semana) tampoco es perjudicial. Lo importante es privilegiar a diario el consumo de alimentos libres de grasas trans.
