Los alimentos integrales son aquellos que contienen grano entero, aportando más fibra, vitaminas, minerales y fitoquímicos.
El consumo regular de cereales integrales (pan, pasta, arroz, cereales del desayuno) contribuye a la reducción de los factores de riesgo relacionados con enfermedades crónicas, en especial de enfermedad cardiovascular, diabetes tipo 2 y ciertos tipos de cáncer, así como varias enfermedades gastrointestinales.
El valor calórico de los alimentos integrales
Ambos alimentos, integrales y refinados, aportan el mismo valor calórico. La diferencia radica en la mayor cantidad de fibra que contiene el integral respecto del refinado.
Lo que ocurre con los alimentos integrales es que brindan mas valor de saciedad y esa es una cualidad que los planes para adelgazar precisan.
Pero debe quedar claro que los alimentos integrales no adelgazan, ya que el aporte calórico es el mismo que sus homólogos refinados. Sin embargo los beneficios de su consumo sobre la salud son muchos.
Educar el paladar
El paladar se educa, y todas las preparaciones integrales pueden ser muy gustosas. Dependerá de cómo se las elabora, condimenta, cocina.
En una alimentación saludable debe predominar (en lo posible) alimentos integrales. La constipación se trata (entre otras maneras) con alimentos integrales. También es recomendable incluir alimentos integrales en los planes hipocalóricos.
Alimentación variada y moderada
La alimentación saludable debe ser variada y moderada. Ninguna exageración es saludable.
En una dieta completa debemos incluir también una buena hidratación.
Siempre debemos recordar que la dieta “saludable” se centra en tres requisitos principales, variedad, equilibrio y moderación.
Una receta rápida, fácil e integral
Una forma sencilla de realizar una masa más saludable para panes y tartas, es la siguiente:
-Mezclar una taza de harina leudante y otra de harina integral. Mezclar ambas harina en seco y agregar una pizca de sal. También se puede ponerle semillas a esta preparación.
-En una taza mezclar 5 partes de agua tibia por una parte de aceite y con eso tomar la masa.
-Formar bollitos individuales si es pan o estirar la masa con las manos en la fuente, si es tarta lo que se va a cocinar.
-Cocinar en el horno o en fuentes tipo horno. En estas últimas cuidar de absorber la humedad para evitar el apelmazamiento.
